Atelier propio.
El proceso del vestido es muy simple y a la vez complejo. ¿Por qué complejo? Porque estamos trabajando con un cuerpo humano tanto a nivel físico y como emocional.
Hay que fusionar el diseño + cuerpo + técnica de patronaje + emociones + la manera de vestir de cada persona + su costumbre de comodidad.
Cada corte, cada línea tiene que ir exacta. Y por eso vamos a vernos aproximadamente unos 7 veces.
- La primera: toma de contacto.
- La segunda: sección privada.
- La tercera: toma de medidas.
- Las siguientes cuatro son: pruebas del vestido.
- Y al final la soñada entrega.